martes, 10 de marzo de 2009

Otros tiempos

Después de un recreo de unos cuantos días, aquí estoy de vuelta.

Cada vez qeu me alejo un poco es porque pasan cosas que no me permiten ni siquiera pensar. Y lo curioso es que empecé con este blog "privado" sólo para relajarme y olvidarme de la realidad actual.

Así que es tiempo de dedicarle unos minutos a los días en que los chicos empezaron las clases en Francia.

Recuerdo el regreso a casa de ese primer día. Las chicas venían repitiendo como loritas lo que les preguntaban sus compañeras, y que desde luego no entendían. Y así fueron aprendiendo. En dos meses ya no habían problemas con el idioma. En el caso de mi hijo, fue a otro colegio. Él, más reservado, no habló mucho. Peero también en su caso el aprendizaje fue rápido.Poco tiempo después ya estaba en el "Cuadro de Honor".

Recuerdo con mucha nostalgia esos días de libertad, de caminar por el centro de la ciudad, de ir a ver vidrieras, de amueblar la casa... era como comenzar de nuevo, con nuevas ilusiones.

Mis pensamientos podían volar. No había estrés... todo parecía estar bajo control. Es que cuando los chicos son chicos...En fin, lo que dicen: hijos pequeños, problemas pequeños.Hijos grandes...

Me gusta acordarme de esa época y sumergirme en ese tiempo suspendido y pensar en todos esos "croissants" (mmm) los quesitos ricos,el pan , las caminatas,los pic-nics, los paseos , los juegos junto a un puentecito romano que ya era casi nuestra propiedad, las idas a la "videoteca" , las cuatro estaciones, los árboles en otoño, cambiando colores, el frío invernal, la vista perdida desde el balcón, observando a la gente que corría presurosa para no perder el tren, o los que esperaban a alguien, las chicas cruzando la estación de vuelta de clases, los taxis esperando clientes,las bandadas de pájaros dibujando figuras increíbles en el cielo, las idas a la playa, el aroma de los bosques, el silencio...