viernes, 9 de diciembre de 2011

Esquizofrenia

Es tan difícil hablar de este tema, que lo he estado evitando. Pero creo que es el momento de enfrentarlo.
Hace tres años o más, mi hija empezó a presentar problemas de conducta. Al principio, decíamos que eran cosas de ella... pero luego empezaron las dudas de si era algo más serio.
Por mucho tiempo ella había estado yendo a una sicóloga, pero sin ningún avance. Hablaba, le mandaba a leer cosas, se reunía con un grupo... nada más.
Luego las cosas tomaron un rumbo más incierto y había actitudes que desde luego, no estaban enfocadas dentro de lo que hace una persona con cordura, y el sentimiento de persecución, y escuchar voces , y sentir que todo el mundo la odiaba, o salir a la calle pensando que podría curar a la gente con su mano... tantas cosas.
Lo hablé con una sicóloga, que me dijo que ella estaba con un brote sicótico y que necesitaba ayuda más que urgente.
Empezó a ir a un siquiatra, luego las cosas se pusieron peores,hubo un intento de suicidio... siguió en casa... con sus altibajos y mi zozobra.
Y hubo que internarla con un brote, en el hospital siquiátrico. Allí estuvo un mes.
Al salir, volvió a ver al doctor que la atendía.
Entremedio de todo, se probó con homeopatía, aromaterapia y cuantas cosas nos dijeran, en nuestro afán por verla mejor.
Estaba en el subibaja cada vez que iba al siquiatra, que además es psicoanalista, y pensábamos que podría ir recuperando su vida con su personalidad sicótica.
Empezaba a estudiar cosas , que luego dejaba tiradas, se entusiasmaba por cosas que luego desechaba... se deprimía...
Yo, supermamá, estaba también en el subibaja, pendiente de sus movimientos, de sus gestos, de sus palabras.
Y sobrevino un segundo intento de suicidio. Y otra vez al hospital.
Esta vez la vio otra siquiatra. Nos citaron a hablar con ella, la pequeña familia que tiene cerca: su padre, su hermano y yo.
Creo que ahí empezó la tranquilidad: al aceptar que la esquizofrenia es una enfermedad como cualquier otra y que la única forma es tomarse sus medicamentos según lo que se prescriba, que no es culpa de nadie lo que pasó y que tampoco hay nada por lo que avergonzarse. Las cosas son como son.
Y así, con la cabeza en alto, empezamos a tomar las cosas con naturalidad. Ella empezó a evolucionar en positivamente y pasado el mes, sin esbozos de esa depresión fulminante, salió.
Eso sí, salió con un plan de hospital diurno. Es decir; tres veces por semana ella va a pasar desde las ocho de la mañana a las tres de la tarde en el hospital, donde hay talleres de rehabilitación, como costura, teatro y otros más. Allí aprende además a socializar con otras personas, a relacionarse sin miedo a ser rechazada.
Han pasado cinco meses desde la última crisis y se ve un cambio radical en ella. Sigue el tratamiento (diferente, desde luego , al que llevaba), pude salir a tomar aire a Argentina, por primera vez en años me reí a mandíbula batiente y me desconecté de todo, absolutamente de todo. Delegué mis responsabilidades por tres semanas.
A mi regreso fui recibida con alegría, y mi hija me había extrañado muchísimo y hasta creo que aprendió a reconocerme y quererme más.
Ahora ella, que estaba en la rama esquizo-afectiva , en la que decía que nunca había tenido amigas ni nunca las iba a tener y menos ,alquien que la quisiera, tiene novio. Y tiene un novio que está al tanto de todo lo que le pasó , es cariñoso, comprensivo y la quiere como es.
La vida empieza a tomar otro color y empiezo a encontrarme conmigo otra vez,después de tanto tiempo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bueno que pudiste encontrar un camino. mi mama tiene la misma enfermedad, pero solo tuvo una internacion reciente, la realidad es que cada día que pasa es peor. fueuna persona brillante, profesional, se caso me tuvo a mi, tengo una hermana y todo... pero el tiempo la deteriroro. hoy no esta bien y los tratamientos no le dan el resultado esperado... los intentos de suicidios fueron cuestiones que hizo muchas veces... y con ello las consecuencias... ya su esposo tuvo dos infartos por eso... y ella jamas reacciono ante eso... en fin... hoy ella se separo y su vida es un calvario.

Anónimo dijo...

egraff igneeasA Anónimo: lo curioso es que tu madre pudo haceruna vida normal... y la enfermedad se descubrió tardíamente,según entiendo. Lo cierto es que hay que tener mucha mucha paciencia y ser conscientes de que las cosas son así y no podemos cambiarlas... solo tratar de vivir cada día.

Super mamá? dijo...

Bueno, eso lo escribí en 2011... Después hubo todavía otro episodio fuerte en 2013 y fue internada nuevamente, por una estupidez, en realidad, de haber dejado las pastillas ... Pero desde que salió, hacen ya dos años, sigue estable, tiene otro novio que la quiere y comprende...y todo va viento en popa! Estoy muy feliz!

Super mamá? dijo...

Bueno, eso lo escribí en 2011... Después hubo todavía otro episodio fuerte en 2013 y fue internada nuevamente, por una estupidez, en realidad, de haber dejado las pastillas ... Pero desde que salió, hacen ya dos años, sigue estable, tiene otro novio que la quiere y comprende...y todo va viento en popa! Estoy muy feliz!