miércoles, 1 de septiembre de 2010

Es hora de retomar la vida

Supermamá...Está divertido ésto de la super mamá...Ya casi me lo creo.... si o fuera porque necesito ayuda para salir adelante, como cualquier ser humano.Porque a veces no entendemos que ésto de ser madre es un compromiso para siempre y más...todavía más.

Y entonces nos olvidamos de que somos personas, de que también tenemos derecho a nuestra vida. Que también una vez fuimos jóvenes y tuvimos que arreglárnoslas como pudimos... con una mamá a larga distancia.

Y que es hora .Que ya es hora .

Que las mamás también se cansan, aunque sean supermamás.

domingo, 21 de marzo de 2010

Y se fue...

En octubre fue la última vez que escribí. Hace taaaaanto tiempo!

En noviembre mami se cayó y se fracturó la cadera.La operaron.

Fueron días de angustia. Y sinembargo ella no perdió su humor, mientras estaba en el hospital.Allí se convirtió en la reina de la sala.Todo el mundo estaba pendiente de ella, de lo que decía, decómo lo decía. Fue increíble cómo se ganó a la gente, sin querer... Al principio fue la rebelión completa , cuando la pasaron a ese lugar. No soportaba compartir su espacio con otras personas, debo decirlo, con menos cultura y mundo que ella. Porque se sentía como una reina. Luego fue aceptando ayuda, aceptando compañía y la fueron aceptando, sin darse cuenta de por qué era su inicial resistencia.

Ya al salir del hospital empezaron las complicaciones: cómo bañarla, cómo sentarla...cómo hacer que comiera... Le conseguí una silla, una cama ortopédica, una enfermera... pero ella ya iba en camino de salida.

Ella ya no quería nada más. Le fue perdiendo ganas al Scrabel, a los torneos de tennis, a la comida... a todo, menos al whiskey.

Qué duro, qué difícil fue verla rendirse,rendirse a los años que había llevado con valentía y alegría, rendirse al verse impotente, incapaz de valerse por sí misma. Qué triste verla encaminarse hacia el fin.

A menos de dos meses de la operación y a casi tres meses de llegar a los cien de vida, empezó a despedirse de todos y de su vida. Quién sabe qué pensamientos, quién sabe qué recuerdos se le agolparon en su adiós.¿ Habrá hecho un recuento de sus años, de sus logros, de sus alegrías y tristezas? ¿Cuál habrá sido su balance? Nadie sabrá... eso se lo llevó bien escondido. Creo que una de sus especialidades fue esconder sus sentimientos más íntimos.Fue muy celosa de sí misma. Casi impenetrable.

Yo creo que se especializó en borrar todo lo malo y recordar sólo lo bueno.Fue su arma de defensa, fue su forma de subsistir hasta esa edad: noventa y nueve años , ocho meses y 22 días.

Y entonces, se fue.