jueves, 9 de octubre de 2008

TIEMPOS SIN ARMONÍA

Me quedé ayer pensando en toda la etapa de la música en casa... En realidad había presencia musical, pero no había mucha armonía ...

Para empezar, la historia de las prácticas del violín, después las carreras que había que pegarse bajo la lluvia... Y ganar tiempo para estudiar. Me acuerdo a veces que volvíamos de la Sinfónica practicando las tablas de multiplicar.

Pero las cosas no estaban bien en casa. No. Mi hija, la que estaba de sandwich, era también el centro de las tensiones. Siempre habían peleas. Y yo como madre no supe cómo manejar el tema de las peleas. Habían muchos enfrentamientos, mucha pérdida de autoridad. Me sentía incapaz de resolver los problemas. La más chica lloraba todo el tiempo y venía reclamándome para que interviniera con su hermanita mayor... Me sentía sobrepasada y sé que más de una vez me salí de mis casillas y les gritaba, otras, las encerraba en el baño... mis métodos no servían. Para qué tantos libros,para qué tanto escuchar programas si no poría resolverlo , yyo que estudié para maestra... mmm.

Muchas veces cuando venía el papá,entonces repartía "fajazos" .Era horrible. Yo no sabía dónde meterme.Era como si me pegaran a mí. Mi hijo mayor lloraba de miedo, no porque le pegaran a él, ya que él nunca estaba en líos, sino al ver agredidas a sus hermanas. Fue una época horrible.

Había tensiones en casa. Recuerdo una vez en que había salido a la calle con los chicos y se me cerró la puerta. Y no tenía llave. Mi marido estaba tan furioso que empezó a darle patadas a la puerta, tratando de romperla o al menos romper la cerradura. Yo salí corriendo asustada a refugiarme a la casa de mi amiga-vecina.

Otro día mi hija, la del medio, se sentó sobre la puerta del horno y la cocina se le vino encima. Menos mal que no tenía ollas ni nada ... Pero me sentía tan desesperada que salí a la calle a llorar de impotencia.

La educación se me salía de las manos. No podía controlarlos y empecé a verlos casi como a mis enemigos. Sin embargo también habían buenos momentos, y casi siempre por las noches me pedían que fuera a sus camas, donde les cantaba canciones hasta dormirlos. Esos eran mis recuerdos más dulces. Mis momentos de paz. Ya no había reclamos, sólo canciones.

Seguro que si pusieran notas a las mamás, no pasaba de grado. No me alcanzaban los promedios.

Y siento mucho que en esas edades hayan tenido a una madre estresada que no sabía para donde agarrar.

Bueno, no es que TODO fuera malo. Habían cumpleaños, habían salidas , había diversión, había una mamá que no se perdía un acto escolar, habíauna supermamá que colaboraba con las maestras dirigiendo obras de teatro, coros y demás. Había una mamá pendiente del progreso de sus hijos. Había una mamá que los llevaba a clases de natación, al coro, a las clases de música, al gimnasio, a la grabación de anuncios... mamá chofer, mamá maestra,mamá mamá.

2 comentarios:

Maria Rapela dijo...

uuuyyyyyyyyyyy que momentos dificiles....quien sabe porque estarian asi de necias las chiquillas...es cierto, ua epoca dificil...como puede surgir un musico en medio de ese despelote....
epoca dificil....seran todos los chiquillos iguales...

Anónimo dijo...

No sé si serán iguales, o si sería así porque yo había perdido el control, o la autoestima,o es que me sentía como otra chiquilla más de la familia...