sábado, 13 de septiembre de 2008

Un vistazo hacia atrás

Hago aquí un alto en el camino, para pegar un salto atrás. Estaba pensando en qué fue lo que me llevó a ser esa "super-mamá"... los antecedentes...


Pero no antecedentes penales, je,je... Quiero recordar un poco mi infancia.


Como ya dije antes, soy la cuarta entre cinco hermanos. Mi niñez transcurrió entre la "quinta" , Montreal, la casa de mi abuela, las idas a Miramar con mi familia postiza, y la quinta otra vez.


Felizmente, pienso que mi niñez fue como la que cualquier chico podría desear: era querida, tenía hermanos, hermanos postizos, papás postizos, amigas, tías, abuelos , mucho espacio para jugar y correr...


La quinta era un lugar fantástico . Vivíamos en una casa que había construído mi padre, ayudado por su hermano y alguno que otro obrero. Era una casa sencilla pero tenía lo necesario, al menos lo necesario pare ese entonces.


Mi padre tuvo muchos altibajos con su trabajo, e incluso en una época quedó cesante de su puesto en el gobierno y tuvo que hacer lo que fuera. En este caso, "lo que fuera" fue repartir chicos en las escuelas, criar gallinas, vender leche (teníamos una vaca super productora) , vender naranjas y mandarinas, tener un "hotel para perros y gatos"... Enfin, papi se las rebuscó para darnos la vida que èl pensaba que necesitábamos.


Ahora que lo pienso, me doy cuenta de que no debe haber sido fácil: íbamos a una escuela privada y había que mantener el "status" de familia acomodada... Mmmm


Mami había sido criada en un barrio elegante . Su padre , un escocés, se había dedicado a la importaciónde telas de Inglaterra. Mami había vivido siempre bien y estaba acostumbrada a salir, ir al teatro y conciertos y codearse con escritores y poetas de aquellos tiempos.


De pronto, se convertía en mamá granjera y cuidadora de perros... Papi se desvivíapor darle una buena vida. Me temo que ella siempre añoró su juventud. Afortunadamente para ella, no era muy sociable, así que no extrañó a sus amigas, pero tal vez sí las comodidades de su casa.


Papi venía de una familia en la que se habían ido empobreciendo. Su madre había heredado muchas tierras en una zona que ahora es carísima, y parece que mi abuelo era medio "tarambana" con el dinero, hizo inversiones y gastos y tuvieron que ir vendiendo todo, hasta que sólo quedó la quinta, al final de la "legua".


Y ahí vivíamos nosotros, ajenos a todos los problemas económicos y las angustias. Ellos parecían siempre salidos de una película de Hollywood, donde todo va bien. Y no es que nosotros fuéramos ciegos, ya que detectábamos diferencias entre nuestros amigos y nuestros compañeros de escuela. A veces era una tragedia pedir que nos compraran un cuaderno nuevo o lápices de colores...


La quinta siempre atraía familiares y amigos, así que los fines de semana, especialmente en verano, éramos multitudes. Papi había construído una "pileta" (como le decimos en Argentina a la piscina) y los veranos eran una maravilla, cuando la limpiábamos, sacábamos todos los sapos y ranas que habían hecho fiesta durante el invierno, papi la pintaba y... comenzaba a llenarse.


El agua era espantosamente fría, sobre todo los primeros días, y había que ser realmente valiente para zambullirse : se nos cortaba la respiración y quedábamos paralizados!


Teníamos una hectárea y media para correr, treparnos a los árboles, comer todas las naranjas, mandarinas , damascos, higos... que se nos ocurriera. Mami inventaba toda clase de postres a base de leche y de huevos , y por las tardes hacíamos fila frente a la ventana de la cocina para que nos diera un vaso de "Vascolet" y pan con miel o scons...


En invierno llegábamos por la tarde de la escuela corriendo a sentarnos a la mesa a tomar nuestra bebida de chocolate caliente con medias lunas o "pebetes" con dulce de leche , mientras esperábamos nuestras novelas de entonces, por radio, desde luego,porque en nuestraniñez no hubo tele. Escuchábamos, amontonados junto al aparato, Tarzán, Sandokán y otra que creo que se llamaba Hacha brava. Ah, qué emocionante era ir siguiento capítulo tras capítulo...


La quinta quedaba lejos de la "civilización" , entonces. La calle era de tierra, que se ponía infernal con las lluvias. Para salir de casa a veces era una tragedia y había que ver como sacar el auto cuando se quedaba empantanado. Todos empujábamos. Para tomar el "colectivo" (aquí dicen bus) había que caminar unas siete cuadras para cualquier lado. No había teléfono , ni siquiera uno público, ni en casa ni en las cercanías. A veces teníamos que pedirle prestado a algún vecino lejano . Conseguir línea telefónica nos llevó años. Cuando lo logramos, nos mudamos a otra casa...


También había que pegar unas buenas caminatas para ir a comprar la comida. Pero normalmente mis padres hacían las compras grandes en una cooperativa de Padres de familia.


La escuela a la que íbamos era muy estricta. Uno casi no podía respirar cuando andaba la directora cerca : qué miedo! En las aulas podía escucharse el vuelo de una mosca: ni chistábamos. Sólo nos relajábamos un poco cuando la maestra tenía que salir un momento de la clase.


Y así como la educación escolar fue estricta,también lo fue en casa. Éramos un pequeño ejército. El que se salvó un poco de la disciplina fue el menor... como era el chiquito...


A papi le teníamos miedo. Lo queríamos, pero le temíamos. Mami era la comprensiva,la amorosa, la divertida, la que inventaba juegos. Papi era la ley . Y nuestro mayor temor era que mami le pusiera alguna queja de nosotros. No nos pegaba, pero cuando nos regañaba nos sentíamos como perros apaleados.


Ahora lo veo desde la distancia. Sé que tenía mucho estrés acumulado y sé que también él había sido criado de forma muy estricta con un padre bastante ausente y una madre que sólo pensaba en la iglesia: misas diarias, comunión diaria y toda la opresión y tabúes de aquella época.


Y creo que ahora, que me estoy dedicando a escribir un poco lo que ha pasado, puedo entender mejor a la "super mamá" de hace tantos años, cuando comenzaba apenas su tarea.


Y eso que todavía no he hablado de mi adolescencia... pero , eso lo haré otro día.

1 comentario:

Maria Rapela dijo...

bonitos recuerdos de infancia....asi que eras como una granjera, o la casa de la pradera...